-¿A qué te referís con la gestión de cosas positivas?
-Una balanza comercial que va a cambiar de sentido, reservas que pueden llegar a cambiar de sentido. Lo podés manejar mal o podés manejarlo bien, pero va a tener un contexto muy diferente.
-¿Hay una visión de inversiones en renta variable, las acciones, que esté basándose en estos escenarios, posicionándose en algunas empresas?
-Hay expectativas sobre la Argentina por cómo se puede recomponer dentro de un contexto más favorable, porque habitualmente estuvo inmersa en contextos desfavorables quizás en el último tiempo lo que los economistas a veces llaman externalidades negativas más causales de la propia gestión. O no, porque siempre hay cosas buenas para rescatar y no todo es negativo. Obviamente, la renta variable, si uno se guía por lo que se experimentó desde el inicio del año hasta ahora tanto en pesos como en dólares en el Merval, el índice que nuclea todas las acciones, ha mostrado que tanto en pesos, por ejemplo, que ha mostrado ganancias por encima de 100% anualizadas a hoy. En dólares ha mostrado su ganancias por encima de los 30%, 35% en dólares. Cuando uno mira también la composición de las acciones, hay del sector energético que reaccionaron primero, de los bancos, que con un tema de volumen y expectativa reaccionaron después. Y no hay que dejar de mencionar que hubieron acciones del panel general que han tenido performance también muy buenas. Eso, creo yo que tiene que ver con una expectativa hacia adelante, y también con una posibilidad del mercado de capitales, muchas veces en contextos inflacionarios, como resguardo de valor, aunque sea en términos nominales.
-¿Cómo funcionó esa cobertura?
-Muchas veces uno necesita alocar pesos en ciertos activos y las acciones funcionan como cobertura. De hecho, en años inflacionarios han acompañado la inflación o la han superado o han estado cerca, entonces ese es un factor que me parece que más allá de las expectativas pro mercado que puedan haber de un próximo gobierno, el mercado de capitales ofreció algún tipo de resguardo. Más o menos en paralelo, creo que hay un punto de contacto en esto con una tendencia que cambió un poco en estos últimos meses que era la demanda de instrumentos dolarizados, los Cedear. Esta cobertura se popularizó más que por el lado de empresas locales listadas acá en el mercado.
-¿Cómo lo ves, desde la perspectiva de ser un consejero de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires esta preferencia que hubo sobre Cedear en mayor grado que las acciones o empresas locales?
-El mercado, los inversores y los que llevan al frente los cash flow de las compañías, van seleccionando los instrumentos que quizás tienen menos riesgo, que pueden ofrecer ciertas coberturas; después, esas coberturas se van arbitrando y por ahí los instrumentos dólar linked, a las tasas, a los instrumentos que eran para cobertura de inflación o algunos instrumentos incluso que tenían tasa fija, se fueron arbitrando. Y llega un momento en el que el mercado también tiene que volcarse a otro tipo de instrumentos en contextos de inflación alta, de alta nominalidad. Y, bueno, en buena hora también se empiezan a ver que pueden haber otro tipo de activos más allá de eso, donde uno puede empezar a tomar otro tipo de coberturas, teniendo en cuenta que también estamos en un mercado donde existen muchísimas restricciones.
-¿A qué obedece el rally en los mercados y los activos argentinos de las últimas semanas?
-Hubo factores externos que vieron que concluía el período de altas tasas en EE.UU., también se pagaron las otras semanas cupones de bonos de soberanos. Ahora, la misión que está en Washington para el tema del Fondo Monetario. Y nosotros partimos de la base de que los activos argentinos tenían un “sobrecastigo” y que toda esta situación electoral también fue generando expectativas con la conformación de las candidaturas, con las elecciones que se fueron interpretando para un lado, para el otro.
-¿Por qué suben los bonos a pesar de que hay cierta incertidumbre sobre lo que pueda pasar?
-Los bonos están funcionando como un lugar de refugio por los precios de default que tienen y porque uno los puede adquirir en pesos, y es una manera de dolarizarse con un activo que en el tiempo podría llegar a ser prometedor. Pero muchas veces sucede, lo que se dice en el mercado, que a veces el precio se termina “comiendo el cupón”, porque los bonos vienen acumulando subas o expectativas mayores quizás a lo que en términos porcentuales para los intereses que paga. Entonces eso a veces da la sensación de que el activo empieza a tener cierto atractivo, Y también, como se vivieron los últimos 30 días subas de precios bastante importantes, se genera cierto clima en que los inversores se deciden a invertir, porque ven que están dando sus frutos.
-¿Cuando mencionás los últimos días, incluís entre los determinantes el contexto político, las definiciones políticas de las candidaturas?
-Las candidaturas pudieron aclarar un poco más el panorama, no al 100%. La postulación de Massa pudo aclarar un poco más el panorama, y junto con las elecciones de las provincias, haber generado cierta expectativa de un consenso político con un poquitito más de fuerza y articulación.
-¿Son eufemismos para decir que lo que viene es una política promercado gane quien gane?
-Me parece que lo que se vendría es una política con un poco más de articulación. El mercado está viendo cómo se vuelven a configurar los equipos de dirigentes que van a estar hacia el futuro, porque los que ya estaban hasta ahora, en su gran mayoría, estaban bastante desgastados. Incluso este Gobierno como coalición ya tiene un desgaste importante, y está esa expectativa arriba de la mesa para los inversores de ver cómo catapultarse hacia adelante un nuevo equipo que vaya a dirigir.
-¿Cómo ves la actualidad de la Bolsa como vehículo de financiamiento para las inversiones minoristas?
-Indudablemente la Bolsa, el mercado de capitales ofrece activos para colocar los pesos a muy corto plazo como es la caución bursátil, que son una herramienta de trabajo tanto para inversores institucionales como para inversores minoristas. Y son una alternativa también a un montón de productos que uno puede tener a disposición. Particularmente se han estado utilizando también muchas plataformas nuevas que han fomentado la inversión minorista y también se ha quizás ofrecido mayor difusión de algunos instrumentos, lo que quiere decir también que sea ofrecido mayor educación financiera , o por lo menos descripción de qué es lo que se puede hacer dentro de la Bolsa, en el mercado de capitales. Si uno se compara con los países que a veces uno desearía ser en términos de dimensión de mercado, falta muchísimo. Y también generar mayor cultura de pensar en el mercado, en qué instrumentos hay, obviamente.
-¿Cuál es el principal impedimento?
-La Argentina pasó por tantas crisis que es lógico que la gente sea reacia o que tenga por ahí algún preconcepto, y también es lógico que en un contexto macroeconómico, con deterioro de la moneda y demás, la gente también tenga menos capacidad de ahorro o menos capacidad de poder pensar en inversiones, pero creo que han habido iniciativas en los últimos dos años, de a través de la tecnología poder llegar a inversores minoristas, que eso lo que tuvo de bueno, más allá de agrandar el mercado y incluir a mayor gente, tuvo de bueno que para incluir a esas personas se tuvo que utilizar la herramienta de la educación financiera, de la difusión de los instrumentos y a nosotros nos parece eso muy importante porque en definitiva esperamos que en el tiempo eso genere un efecto derrame para que realmente se pueda conocer más sobre el mercado y también para que la gente tenga a disposición mayores herramientas y que después elija obviamente.
-¿Hay que revertir una sensación social contraria a la actividad fin
-¿Cómo se ve la perspectiva económica desde una institución como la Bolsa, que reúne a todos los sectores económicos?
-Además de ser la institución más antigua de las que forman la gremial empresaria, digamos, del Grupo de los 6, en su Consejo nuclea a todos los sectores de la economía y me parece que eso es un aporte institucional que podemos hacer porque podemos promover acuerdos y consensos dialogando entre distintos sectores, creo que eso es un capital institucional y político muy importante, dentro del sector privado, por supuesto. Creo que el mercado de capitales tiene que ser parte de la agenda del próximo Gobierno porque indudablemente es un sector que puede contribuir por la diversidad de sectores que reúne y por la diversidad de instrumentos que tiene al crecimiento de la economía, a la generación de empleos, a la generación de obras que va a necesitar el próximo gobierno.
-¿Hay que revertir una sensación social contraria a la actividad financiera que percibe la faceta especulativa no productiva de la actividad?
-Creo que claramente ha habido tanta discordancia en términos políticos y se ha usado al mercado de capitales tampoco con el potencial que tiene que creo que se lo ha podido ver en acción muchas veces, pero no se le ha dado la valoración necesaria que tiene. Entonces, creo yo que el mercado siempre estuvo a la altura de las circunstancias, pero quizás no se le ha podido llegar a dar la valoración necesaria porque hubieron problemas más urgentes de contexto o porque simplemente la dirigencia política no ha podido darlo a conocer como corresponde y tampoco creo que sea algo fácil, es una construcción en conjunto, el mercado de capitales es una parte más de la economía que tiene que que tiene que funcionar en conjunto obviamente y cuando a veces las cosas no funcionan en conjunto es más difícil poder derribar ciertos preconceptos.
-¿Cuál es el rol del mercado en un proceso político?
-El mercado y la Bolsa siempre están dispuestos a dialogar con todos. Porque es importante contar con un consenso político, es importante contribuir a aquella política de Estado y que se pueda también entender que el mercado no es como un auto que va en paralelo, sino que el mercado es un vagón mas del tren que va en conjunto con un proyecto de país, con un proyecto de economía y también con un proyecto de dirigencia, que eso es importante a nivel privado y también a nivel público. Es importante que los dirigentes políticos nos consideren y ahí vamos a estar para contribuir a lo que signifique de vuelta crecimiento económico, a lo que signifique generar nuevos puestos de empleo, a lo que significa poder contribuir con herramientas para que las pymes se puedan desarrollar, para que el Estado pueda acceder a financiamiento, a los institucionales.
-¿Cómo funciona una rama juvenil en la Bolsa de Comercio, una entidad tan tradicional?
–La Bolsa de Comercio Joven es un espacio que nos dio la oportunidad el presidente Adelmo Gabbi para construir, que viene a complementar en lo que se pueda al funcionamiento de la institución y es un espacio, yo soy coordinador de la “Bolsa joven”, pero todos los que conformamos ese espacio estamos al mando de empresas o tomando decisiones y teniendo responsabilidades día a día muy importantes, pero lo que viene a transmitir esta conformación de dirigentes es poder aprender de los que hoy están al frente de los cargos más importantes. Estamos para aprender de quienes hoy están comandando la institución, es una manera también de dar lugar a que se vayan formando cuadros que puedan complementar mañana, digamos, lo que haga falta que la institución necesite. Y permite desde temprana edad entender cómo funciona la institución.
Fuente: https://www.cronista.com/finanzas-mercados/guido-lanzilotta-el-proximo-presidente-que-elijamos-tendra-que-gestionar-algo-positivo/